¿Qué zapatos respetuosos ponerle para la guardería?
¿Por qué se recomiendan las zapatillas de ir por casa en la guardería?
En la guardería, los niños pasan gran parte del día en el interior. Los profesores suelen pedir un par de zapatillas de casa para reemplazar el calzado de calle.
Pero más allá de estos consejos prácticos, las zapatillas de casa respetuosas son fundamentales en el día a día de los más pequeños. Te explicamos por qué son útiles y cómo elegir las adecuadas según la edad y las necesidades de tu hijo.
Higiene, comodidad y autonomía en clase
El suelo de las aulas es frío, sobre todo en invierno. Usar zapatillas de casa respetuosas ayuda a evitar que los pies de los pequeños se enfríen, resbalen o se hagan daño.
A veces oímos que los bebés cogen frío por los pies, pero no es cierto. En realidad, es principalmente una cuestión de comodidad. Tener los pies fríos no te pone malo, pero puede ser incómodo para tu hijo, sobre todo si el suelo está muy frío.
Las zapatillas de casa ayudan a calentar los pies de los niños en invierno y los protegen de terrenos irregulares.
Los niños también pueden moverse con mayor libertad y estar más cómodos. Y si son fáciles de poner, les ayuda a ganar independencia, especialmente al vestirse después de la siesta, después de jugar o al ir al baño.
Lo que piden (o imponen) las guarderías
Cada guardería tiene sus propias normas, pero en la mayoría de los casos, las zapatillas de guardería son obligatorias desde el inicio del curso escolar. Los profesores insisten en modelos fáciles de poner, resistentes y que se ajusten bien al pie.
Algunos coles incluso recomiendan un tipo específico de calzado: con suela blanda, de tela o de piel. Por lo tanto, es fundamental leer atentamente la lista de suministros.
El papel de las zapatillas en el desarrollo motor
Las zapatillas de casa no son solo para protegerse. En preescolar, los niños aprenden a comprender mejor su cuerpo. Los zapatos respetuosos o las pantuflas de cuero, ligeros y flexibles, promueven una mejor postura y favorecen los movimientos naturales del pie. Esto es similar a la sensación de estar descalzo, ideal para fortalecer el arco del pie y desarrollar el equilibrio.
Preguntas recurrentes sobre las zapatillas de guardería
Al volver al cole, muchos se preguntan qué zapatos llevar. Entre las instrucciones del profesor y la comodidad de tu hijo, no siempre es fácil entenderlo. Aquí encontrarán respuestas sencillas a las preguntas más frecuentes.
¿Por qué usar pantuflas en la guardería o en el cole?
Permiten que los niños estén cómodos todo el día, manteniendo los pies calientes y limitando la suciedad en el aula. También son una buena manera de fomentar la independencia y evitar resbalones en los pasillos.
¿Qué zapatillas para la guardería?
Lo ideal son unas pantuflas blanditas como las que ofrecemos en Pasitos de Gigante. Marcas como Robeez o Inch Blue son perfectas: suaves, ligeras, de piel natural y fáciles de poner .
Algunos modelos, como el Inch Blue Gripz, también tienen una suela de goma, perfecta para caminar sobre suelos mojados, como alrededor del lavabo.
¿Necesitas un par para el invierno y otro para el verano?
Depende del colegio, pero suele bastar con un par de zapatillas ligeras de cuero para usar en interiores todo el año. En invierno, si hace frío en el aula, unas pantuflas forradas pueden aportar un poco más de abrigo, como las pantuflas Homie de Igor.
¿Cómo sé si me quedan bien las pantuflas?
El zapato debe quedar ajustado sin apretar. Deja aproximadamente un centímetro en la parte delantera para que los dedos se muevan. Para ayudarte, hemos creado una herramienta específica en nuestra web, "Ayúdame a elegir", que te ayudará a elegir la talla correcta para tu hijo, según la longitud exacta del pie.
Cómo elegir las pantuflas adecuadas para el jardín de infancia
No todas las pantuflas son iguales, sobre todo cuando se usan todo el día en la escuela. Para garantizar la comodidad de tu hijo, es fundamental prestar atención a ciertos criterios. Unas buenas pantuflas deben ofrecer un buen equilibrio entre flexibilidad, seguridad, practicidad y materiales de calidad. Aquí tienes algunos aspectos que debes comprobar antes de comprarlas.
La suela: flexible pero antideslizante.
La suela es uno de los primeros aspectos a revisar. Debe ser lo suficientemente fina y flexible como para que el niño sienta el suelo, como si caminara descalzo . Esto favorece el desarrollo adecuado del arco plantar y el equilibrio.
Pero cuidado: también debe ser antideslizante para evitar resbalones , especialmente en suelos lisos de aulas. Una suela de goma flexible, fina pero con buen agarre suele ser la mejor opción para guarderías.
La flexibilidad del zapato
Para no obstaculizar el movimiento del pie, el zapato debe poder doblarse con facilidad. Evite los modelos rígidos que bloquean los dedos o impiden que el pie gire con naturalidad.
Un zapato flexible se adapta a los movimientos del niño y le permite correr, saltar y agacharse sin restricciones. Ofrece una sensación similar a la de ir descalzo , lo que respeta su desarrollo motor natural.
El material de la zapatilla a elegir
Los pies de los pequeños sudan con facilidad, sobre todo cuando pasan horas en interiores. Elige materiales naturales y transpirables : el cuero suave o el algodón orgánico son excelentes opciones.
Las pantuflas de cuero son populares por su transpirabilidad, flexibilidad y facilidad de cuidado. Mantienen los pies calientes sin sobrecalentarlos y duran mucho tiempo, incluso después de muchos viajes a clase o a casa.
Facilidad de colocación
Para fomentar la independencia, las pantuflas deben ser fáciles de poner . Esto es especialmente importante durante el primer año de guardería, cuando los niños aprenden a hacer cosas por sí solos. Unas bandas elásticas suaves, un cuello que se abre fácilmente o una pequeña pestaña en la parte trasera pueden marcar la diferencia. En Pasitos de Gigante, nuestra colección de pantuflas está diseñada para que los niños se las pongan solos, sin lágrimas ni frustraciones.
Resistencia a lo largo del tiempo
Un buen zapato de guardería debe ser duradero, ya que los días de escuela los someten a mucha presión. Debe conservar su forma, ser flexible y no desgastarse rápidamente a pesar de los viajes diarios.
Por otra parte, es mejor evitar prestarlos entre hermanos: aunque sea tentador, no es muy higiénico ni necesariamente adaptado a la morfología de cada niño.
La suela se adapta a tu forma de caminar y una zapatilla ya usada puede dificultar la comodidad o la postura del pequeño.
Nuestros consejos para un regreso al cole sin problemas
Empezar el preescolar suele ser un gran paso para los niños... ¡y también para los padres! Cada pequeño detalle cuenta para que todo salga a la perfección. Usar pantuflas en preescolar puede parecer trivial, pero realmente ayuda a crear una rutina reconfortante. Al elegir el estilo adecuado y anticipar las necesidades diarias, puedes facilitar la transición y hacer que tu hijo tenga más confianza desde el primer día.
Cómo preparar a tu hijo para usar pantuflas en el colegio
Antes de que empiece el curso escolar, sugiera a su hijo que use sus pantuflas suaves en casa para que se acostumbre a ellas. Esto le ayudará a familiarizarse con la textura, la forma y cómo ponérselas. Juegue con ellas, dejándole que se las ponga y se las quite solo. Esto crea un ritual positivo en torno a este pequeño gesto cotidiano.
Cuanto más cómodo se sienta con su par de zapatillas , más independiente será una vez en la escuela.
Anticipar el cambio de talla y el cuidado
A veces, los zapatos de bebé se dañan, se mojan o se ensucian. Tener un segundo par listo en el bolso o en casa puede ser de gran ayuda. Además, recuerda cuidar bien los zapatos de cuero, que son populares por su suavidad. Si te preguntas cómo lavar los zapatos de cuero de bebé, un paño húmedo suele ser suficiente para una limpieza suave.
Evita la lavadora: un cuidado adecuado alarga la vida de las pantuflas de piel manteniendo su comodidad.
