A SABER
Vamos a tomar un ejemplo concreto que podrás reproducir con las medidas de los pies de tu hijo.
Si los pies de un niño miden 12,3 cm, lo ideal es que sus nuevos zapatos nuevos sean aproximadamente 1 cm más largos, es decir, 13,3 cm. Como no siempre es posible que exista 1 cm exacto, te damos un margen entre 0,8 cm y 1,2 cm.
Entonces, para un pie de 12,3 cm, los zapatos pueden medir entre 13,1 cm y 13,5 cm cuando vayas a comprarlos.
Tu pequeño gigante ya no tendrá suficiente espacio para sus pies cuando solo le quede un margen de 0,4 cm. Si los zapatos que has pedido miden 13,5 cm, deberás cambiarlos cuando el pie mida 13,1 cm.