¿Cuántas veces se cae un bebé antes de caminar?

Caer es parte del aprendizaje
Cada caída es un pequeño paso hacia la independencia y la movilidad. Al principio es un poco confuso, pero los bebés aprenden a dominar el equilibrio . Es un ejercicio diario para que sus músculos, coordinación y confianza se desarrollen sin problemas. Al intentarlo, caerse y luego levantarse, finalmente lo consiguen.
Estos momentos de desequilibrio son, en realidad, verdaderos momentos de aprendizaje. Permiten que el cuerpo ponga a prueba sus límites, ajuste sus movimientos y anticipe mejor el espacio. Y la buena noticia es que los bebés son mucho más resilientes de lo que creemos.
¿Por qué se caen tanto los bebés?
Antes de caminar, todo es nuevo: su centro de gravedad aún es inestable, sus piernas carecen de tono muscular y su orientación aún se está desarrollando. Al ponerse de pie, desplazarse usando muebles o intentar mantenerse de pie sin apoyo, a menudo se caen porque su cuerpo aún busca apoyo.
También es importante saber que los bebés aún no tienen un buen sentido de la distancia ni de los obstáculos. Y a veces simplemente se caen porque quieren ir demasiado rápido para sus piernas, que aún están aprendiendo .

De media, ¿cuántas veces se cae un bebé al día?
Según un estudio de 2012, los bebés entre 12 y 19 meses se caen un promedio de 2.368 veces antes de poder caminar.
Eso equivale a 17 caídas por hora durante la fase de aprendizaje de la marcha . Y es perfectamente normal. Cuanto más lo intenta, más se cae. Y cuanto más se cae, más progresa. Es un círculo virtuoso que a menudo olvidamos cuando nos preocupa ver a nuestro hijo desplomarse por enésima vez.
Estas caídas rara vez son graves, ya que a esta edad los reflejos de protección son naturales. El cuerpo es flexible y el peso se distribuye de forma que se reducen los impactos .
¿Cómo saber si un bebé caminará pronto?
Antes de salir sin ayuda, un bebé pasa por varias etapas, cada una tan emocionante de observar como la anterior. Cada pequeño logro —mantener la cabeza erguida , ponerse de pie, gatear, impulsarse— prepara su cuerpo para descubrir el caminar. Es una secuencia natural y progresiva que le permite desarrollar sus músculos, su coordinación y su confianza .
Como padre, puede detectar señales concretas de que su hijo se acerca a este nuevo hito. La idea no es presionarlo, sino animarlo en el momento oportuno.

Señales de que está listo
Antes de caminar solo, el bebé suele ponerse de pie ayudándose de muebles, mantener el equilibrio durante unos segundos o intentar cambiar de un soporte a otro. También puede empezar a gatear, un paso importante en la marcha .
Si te preguntas a qué edad gatea un bebé, no hay una regla fija. Algunos empiezan alrededor de los 7 u 8 meses, otros más tarde.
Tu bebé también demuestra que está listo para caminar cuando siente más curiosidad por estar de pie, explora más e intenta moverse sin que lo carguen. A veces empieza a soltarse... dando unos pasos vacilantes . Estos son momentos preciosos que presagian un cambio real.

Cada niño progresa a su propio ritmo.
Probablemente oirás frases como "la mía empezó a caminar a los 10 meses" o "dio sus primeros pasos a los 17 meses". Y quizá te preguntes a qué edad suele caminar un niño. En realidad, todo depende de cada niño.
La mayoría de los niños empiezan a caminar entre los 12 y los 18 meses. Pero algunos empiezan antes, otros se toman su tiempo. No es un retraso, es simplemente su forma de hacer las cosas. Lo importante es que están progresando, probando y esforzándose.
Lo importante es respetar su ritmo, sin compararlos. Y si te preguntas cómo ayudar a tu bebé a caminar, recuerda que la mejor ayuda es tu paciencia, tu ánimo y un entorno seguro para que explore a su propio ritmo.
¿Necesitas zapatos para que tu bebé aprenda a caminar?
Caminar descalzo sigue siendo la mejor manera de que los bebés aprendan a moverse. Les permite sentir el suelo, desarrollar su equilibrio y fortalecer su pisada de forma natural. Pero cuando hace frío o el suelo es áspero, los zapatos o calzado para primeros pasos son una excelente alternativa.
Ligeros y flexibles, protegen los pies de los pequeños sin restringir su movimiento. En Petits Pas de Géant, encontrarás modelos diseñados para acompañar a los bebés, respetando su necesidad de libertad.
Descubre más en nuestro artículo sobre zapatos para aprender a caminar.