Etapa 1: el bebé gira de espaldas a boca abajo, adopta la posición de la esfinge (se levanta sobre sus antebrazos para mirar más lejos, y también es capaz de volver a jugar boca abajo sin apoyo), gira sobre su estómago para alcanzar juguetes que están a los lados.
Etapa 2: el bebé aprende a voltearse de boca abajo a espaldas, comienza a rodar, gatear y ponerse en posición de gateo. Finalmente, puede sentarse desde la posición de gateo.
Etapa 3: el bebé pasa de estar sentado a gatear, luego aprende a gatear y, eventualmente, a ponerse de pie y caminar.
Espera a que Marta sepa sentarse y no la pongas sobre un cojín.
Deja que Marc suba los escalones del tobogán en vez de ponerlo arriba.
Mira como Lucas se agarra al sofá para moverse como un cangrejo y no le pongasle un andador inútil y peligroso.
En eso consiste la libertad de movimiento.
No sujetes los brazos de Ana mientras camina. Aunque aún no sepa hacerlo, aprenderá por sí misma. El equilibrio es clave para aprender a caminar, y ella debe encontrarlo sola. Podemos ayudarla dejándola descalza lo más posible. Sus pequeños pies captarán mejor la información sensorial, se fortalecerán y evitarán caídas.
Un niño que se siente seguro en su entorno y está estimulado pasará por todas las etapas de su desarrollo motor por sí mismo, a su propio ritmo.